30/6/07

Sabado 30 de junio

No hemos podido juntar bastante dinero para al alquiler aunque no importa, el casero nos quería echar de todos modos. Le sentó muy mal que Jaime rompiera la ventana con el sofá y más aun que este cayera encima de su Audi A5 recién comprado.
Parece que vino aposta al edificio para atender unas quejas sobre unos vecinos que tienen amontonadas cantidades ingentes de basura en su piso (desde luego alguna gente no sabe convivir) y sucedió todo aquello. Entiendo que este enfadado pero desahuciarnos me parece excesivo… por suerte la policía no se ha atrevido a entrar a sacarnos debido al olor y los derrumbamientos de las pilas de basura, lo intentaron dos veces pero la primera se desmayaron todos los agentes y la segunda vez (que vinieron con mascarillas) fueron sepultados, así que de momento estamos pasando aquí los días mientras buscamos solución.
La verdad es que las cosas nos van algo mejor. Jesús vio una cola delante de una iglesia y se unió a ella (se une a todas las colas por si dan algo gratis) y resultó que estaban repartiendo ropa, como le vieron vestido con harapos le dieron una caja llena. Por cierto que pequeño es el mundo, la mayoría de la ropa es la que Jaime le dio por error a nuestra vecina.
El tema de la comida también ha mejorado, por una parte porque ya no están Jaime y Nandi que eran los que más consumían y por otra por que unos chavales muy majos nos ponen cada día algo de comida en un cubo que subimos por la ventana con una cuerda. Nos dicen que somos un ejemplo para no sé qué del movimiento ocupa, y que nuestra protesta contra el precio de la vivienda está teniendo repercusión o algo así. Me pregunto si tendrá algo que ver con las cámaras que vienen a grabar al pie del edificio de vez en cuando.

8/6/07

Viernes 8 de junio

Hoy no me siento capaz de escribir, es un día muy triste. Ayer detuvieron a Jaime por escándalo público. En pleno ataque de furia arrancó la cocina del sitio y encontró medio embutido calcinado de los que preparamos cuando nos mudamos, pero Nandi que estaba cerca de allí lo alcanzó antes. Al final terminó persiguiendo al cerdo por la calle, con tan mala suerte que desmontaron la terraza de un bar.
Ahora Jaime está en la cárcel y Nandi en el zoologico. Supongo que el ir vestido con harapos no le ayudó mucho.
Puede que Jesús y yo también nos tengamos que marchar pronto, hemos tenido problemas con el casero pero ya lo contare en otro momento.

7/6/07

Jueves 7 de junio

Escribo estas líneas encerrado en la letrina, tengo mucho miedo.
No nos quedan bordes de pizza, ni restos de arroz tres delicias, ni migas de galletas… no nos queda nada. Llevamos una mala racha con la recolecta de monedas, apenas hemos reunido unos 5 euros. Nuestro aspecto es tan lamentable que ya no nos dejan entrar en los bares ni en los Macdonals, la gente se cambia de acera para no cruzarse con nosotros.

Oigo sus pasos… se acerca… espero que pase de largo…

La lucha por los restos de comida se ha tornado una batalla feroz y sin piedad, nos empujamos y golpeamos con tal de hacernos con cualquier resto que encontramos, pero por si eso no bastara las cucarachas se han multiplicado y han acabado con todo.

Parece que se aleja… ¡oigo gritar a Jesús! Creo que lo ha atrapado… pero mejor él que yo… hemos encontrado un vaso con dos aceitunas (o algo parecido a aceitunas al menos) en el cuarto donde dormía David y aprovechando que Jaime no puede hacer movimientos rápidos yo he cogido una y Jesús otra. Grave error, ya no recordábamos que cuando tiene tanta hambre pierde el control de sus actos. Ha estado media hora lanzando todo lo que hay por el suelo contra nosotros hasta que hemos tenido que escondernos. Por un momento me he alegrado por que ha movido tanto la basura que ha desenterrado el sofá, pero enseguida lo ha lanzado por la ventana. En ese momento es cuando me he encerrado en la letrina, pero por el ruido diría que ha lanzado también el televisor. Quizás cuando Jaime se calme podamos recuperar el sofá y turnárnoslo para dormir, los montones de papel empiezan a parecerme incómodos, además Nandi ya se ha comido la mayoría.